El
amor es una energía mediante la cual los seres humanos nos vinculamos. Esta
energía, este amor en ocasiones puede estar acompañada de sentimientos de
ternura y cariño y a veces no.
Este
amor se puede canalizar de dos maneras, de una forma sana cuando le ponemos
conciencia, de esta manera amo al otro de la misma forma que me amo a mi mismo,
sin perderme en los otros. Este es un amor adulto, maduro.
La otra forma del
amor es inconsciente, es un amor
infantil, también llamado amor ciego, es un amor que no tiene orden.
En
el artículo de este mes quisiera hablar de un tema que en los últimos tiempos
le estoy prestando mucha atención, porque observo desde mi propia historia y de
las de muchos de los que me rodean como estamos imbuidos en estas lealtades
familiares invisibles, y quisiera explicar que significa esto de una manera
sencilla, para que tanto aquellas personas que están iniciadas en el mundo del
crecimiento personal, como para las que no lo están entiendan el significado de
una forma sencilla.
Decimos
lealtades porque somos lo que se espera de nosotros para el grupo, invisibles,
porque esto sucede de una manera inconsciente, no nos damos cuenta, no lo
vemos, y familiares porque pertenecemos a un sistema familiar, lo que podríamos
decir nuestro clan. Desde el mismo instante en que nacemos formamos parte de
nuestro sistema familiar. Tenemos una gran necesidad de pertenecer a nuestra
familia, esto está grabado en todas nuestras células y haremos cualquier cosa
por ese sentido de pertenencia, cualquier cosa, porque en nuestro cerebro más antiguo
está grabado esta necesidad, como en años pasados, aquel que era castigado al
ostracismo era fácil que pereciera, pues igual pasa hoy en día, la misma
sensación de que no formas parte de tu familia, de que no perteneces a ella, te
da un sentido de inseguridad muy grande y asusta tremendamente.
Desde
muy pequeños, debido a una exigencia social, familiar, se nos exige una
respuesta a lo que los padres nos demandan, a lo que la familia nos pide, combatimos
desde bien jóvenes por ser lo que los demás esperan que seamos, dentro de las
familias se comparten los valores, se espera que funcionemos de maneras
determinadas. Cada uno dentro del grupo tiene una identidad propia, pero como
grupo, como sistema, existen unos hilos invisibles, unas normas invisibles, a
veces nombradas verbalmente a veces no nombradas, guiones de vida, formas, interpretaciones
que de alguna forma todos seguimos, y cuando esto no sucede, cuando algún miembro
sale de estos lazos, es retirado, separado del grupo, se le excluye, lo que
significa la propia muerte simbólica. La pertenencia da seguridad, como estar
en los brazos de mama cuando eres un bebe.
Es
normal que cuando se es chiquito se tenga esta necesidad de pertenecer, pero al
ir haciéndonos mayores necesitamos crecer, volvernos autónomos, pararnos para
observar lo que nos sucede y cambiar en nosotros lo que haga falta.
No
has tenido nunca la sensación de estar repitiendo una y otra vez las mismas
historias? Pues esto tiene mucho que ver con las lealtades invisibles de las
que os hablo en este artículo. Porque nos quedamos pegados a nuestro sistema y
no avanzamos, y repetimos las historias de los nuestros, de los más cercanos o
de los más alejados. Es seguro que dar un paso hacia adelante, ser autónomo y
pensar de manera distinta no significa que vas a dejar de pertenecer a tu
familia. No tenemos que responder a lo que los otros desean. Crecer y ser
adulto significa desarrollar autonomía propia, hacer tu propio camino. Cortar
los nudos que nos atan al pasado. Ser lo que yo soy, consciente.
Las
expectativas de los demás nos atan y no nos dejan avanzar, a veces se está más
pendientes de lo que te piden otros que lo que tú mismo deseas. Este es un amor
infantil que no te deja crecer. Yo pongo mis propias normas de vida y de esta
forma dejo de repetir historias, pero para esto tengo que renunciar a la
seguridad familiar, tengo que abrirme a lo nuevo, a la incertidumbre de no
saber cómo será, pero seguro que mis cualidades únicas me darán la fuerza para
avanzar hacia la vida.
Para
poder hacer lo que hemos venido a hacer a esta vida es importante conocer tu
historia familiar, para ver lo que sucedió antes de ti y no seguir repitiendo
pautas que ya no sirven ni a unos ni a otros pero que por amor ciego y por esa
necesidad de pertenencia seguimos repitiendo. Es importante poner conciencia de
si hay algo que hace que no avancemos en nuestra vida, parando a preguntarnos qué
es lo que nos sucede, para no quedar anclados al pasado, para darnos cuenta de
a quien estamos siendo leal quedándonos sin vivir la vida que hemos venido a
vivir.
He
visto a muchas personas ancladas en sus vidas, atrapadas y fieles a sus
sistemas familiares, sintiendo una gran culpa que las ata, las oprime y no las
deja avanzar, creyendo que si lo hacen de una manera diferente a los suyos, si
caminan hacia adelante sin mirar atrás, serán excluidas del sistema, y entonces
deciden no avanzar, sin darse cuenta de que no viven y no son felices.
Hubo
un tiempo en el que no entendí cómo funcionaba la vida, cada día la entiendo un
poquito más. Me abro a nuevas posibilidades, aunque no tenga los registros sé
que lo anterior ya no es funcional para mí, ya no me sirve no funciona, y soy
consciente del tiempo que me paralice. Quiero encontrar nuevos caminos y para
ello necesito ensayar nuevas respuestas, desarrollar mis propios talentos y
ponerlos al servicio de la vida. De niña necesitaba sentirme parte de, cuando
en la adultez hay deficiencias seguimos necesitando pertenecer, pero cuando
maduramos y nos atrevemos a vivir nuestra propia vida, dejamos de repetir
historias, dejamos de estar anclados a algo que ya no funciona, nos volvemos
autónomos, seres sonrientes y sin duda seguimos perteneciendo a nuestro sistema
familiar, pero ahora con más criterio y menos apegos. Fieles a nosotros mismos
y viendo con claridad lo que es nuestro y lo que no.
“Tienes
tus ancestros incrustados en la piel y en los sesos. Avanza hacia el futuro
desprendiéndote de su tiranía” Alejandro Jodorowsky
Muy interesante artículo. Gracias
ResponderEliminar