CAMBIANDO MIS CREENCIAS LIMITANTES

“EL HOMBRE A MENUDO SE CONVIERTE EN LO QUE CREE SER”
Mahatma Gandhi

Son nuestras creencias las que definen nuestros pensamientos, nuestras emociones, nuestras acciones. Aquellas primeras creencias que están en la base de cada persona dan forma a nuestra vida y también la controlan.

Estas líneas tratan sobre estas primeras ideas que vamos adquiriendo sobre nosotros mismos para que entendamos cómo se gestan, de dónde surgen, qué hacen en nuestras vidas y cómo podemos cambiarlas.

¿Te has dicho alguna vez
“No merezco”, “No soy suficiente”, “No puedo”, “No valgo”,…?

Este estilo de frases, que nos decimos con más frecuencia de las que quisiéramos, nos están limitando. Antes de cualquier acción existe un pensamiento y estos se sustentan sobre las creencias más arraigadas por lo que si una persona decide cambiar algo de las acciones que desarrolla o de sus comportamientos sin duda alguna antes tendrá que revisar sus creencias.

Qué tipo de creencias tienes
¿Te potencian o te limitan?

En mi trabajo en el ámbito del Coaching y Crecimiento Personal aún no he conocido a nadie que sintiéndose bien y con creencias positivas buscara mi ayuda. Por el contrario, la generalidad de las personas con las que trato hablan de deseos de cambio y mejora en algún aspecto pero esos deseos se tropiezan con unas creencias arraigadas que son el origen del problema.

Las creencias limitantes, como la propia palabra indica, están limitando nuestras vidas. Todos las tenemos. Son aquellos pensamientos que hemos ido construyendo basados en la experiencia propia que hacen que interpretemos la realidad de una manera limitante para nuestro potencial desarrollo y dificultan o impiden que alcancemos nuestros objetivos.

Imagínate a dos personas que tienen como objetivo conseguir un nuevo puesto de trabajo. Una se está diciendo que no va a poder, que hay personas más validas, que no se ha preparado lo suficiente. La otra está segura de sí misma, sabe que su formación es muy valiosa y que además en otras ocasiones ya lo ha conseguido. ¿Quién crees que conseguirá el nuevo puesto?

¿Cómo se construyen las creencias?

Las creencias fundamentales de cualquier persona tienen su arraigo en nuestros primeros años de vida aunque también las vamos construyendo a lo largo de nuestra vida adulta. Se instalan sobre todo en nuestro período de aprendizaje a través de nuestras figuras de apego, nuestros padres generalmente, nuestra familia. Las creencias instauradas en estas fases tempranas suelen ser las que a la larga dan más problemas de falta de confianza y autoestima. Si le repites constantemente a un niño que no puede, que no se merece, que es tonto, que no vale para nada…acabará creyéndoselo. En la forja de las creencias en el interior de cada uno intervienen también los educadores, el colegio, y ya en la edad adulta las vamos construyendo en base a la sociedad en la que vivimos, la cultura, la vida laboral, las relaciones personales, amistades, parejas…

¿Te suena?

Si dejo a mi novia nadie más me querrá.
¿Dónde vas a estar mejor que aquí?
Si dejo este trabajo no encontraré otro.

Este tipo de creencias limitadoras suelen ir asociadas a pensamientos de miedo y derivan de ideas y sentimientos que tomamos como ciertos aunque no lo sean. Los incorporamos a nuestro ser a base de repeticiones pasando a formar parte de nuestro subconsciente.

¿De dónde vienen nuestras creencias?

La Teoría del Inconsciente de Sigmund Freud  señala de una forma sencilla cómo funcionamos. Según esta Teoría tan sólo un 5% de nosotros se expresa de una manera consciente mientras somos producto del restante 95% que es donde guardamos ocultos todas las creencias y miserias inconfesables sobre nosotros y que hemos ido recopilando a través de los años fruto de las emociones vividas y de nuestras experiencias vitales.

Esto incluye las ideas de otras personas que creemos más expertas que nosotros y que hemos hecho nuestras sin cuestionarlas hasta convertirlas en nuestros valores y principios fundamentales. Es nuestra parte oculta que no conocemos o negamos, pero no por ello deja de expresarse en nuestra vida.

El poder de las creencias

Las creencias tienen el poder de crear o destruir

Son ellas las que dirigen nuestros pensamientos y por lo tanto nos condicionan constantemente. Pueden bloquearnos impidiéndonos lograr nuestros objetivos o potenciarnos y llevarnos a alcanzar retos que parecerían imposibles. La diferencia reside en nuestro interior y en las decisiones que queramos tomar sobre nuestras vidas.

Si piensas que todo va a salir mal se dibujará un futuro negro ante tus ojos.

Si crees que lo conseguirás te espera una vida llena de éxitos y aventura.

Cuando cambiamos nuestras creencias nuestra vida cambia.

“Tanto si piensas que puedes como si piensas que no puedes estás en lo cierto"   

Henry Ford

9 ideas para cambiar tus creencias

Ø Para. Date cuenta de que tú no eres tus creencias ni tus pensamientos sino esa conciencia que las experimenta. Vivimos en piloto automático. Para ello te ayudará la meditación, la respiración, la relajación.

Ø Observa tu forma de expresarte e intenta detectar frases del tipo

 Creo que… Tengo que…Me temo que…

 Todo me sale mal, hago todo lo que puedo…

 Soy tonto, soy tímido, soy feo…

Ø Observa cuales de tus creencias están basadas en tu experiencia vital y cuales están basadas en creencias colectivas y cuestiónalas.

Soy muy buena porque ayudo a todo el mundo (pero me olvido de mí).

Para ser un buen trabajador tengo que responder a las necesidades de mi empresa (pero me olvido de mí).

Ø Escoge una creencia limitante en ti y hazte las siguientes preguntas:

¿Qué intención tiene esa creencia?

¿Cuál es la creencia opuesta positiva que quieres incorporar?

¿Cómo mejoraría mi vida con la nueva creencia?

¿Cómo puede empeorar?

¿Qué es lo mejor que te puede pasar si continuas con la vieja creencia?

¿Y lo mejor que te puede pasar con la nueva?

Ø Repite la nueva afirmación tantas veces como puedas. Cada vez que repetimos algo que nos hace bien se instala un nuevo raíl en el cerebro que construye realidades nuevas. Esta es una forma de re-programar tu cerebro.

Ø Asocia nuevas creencias a través de comportamientos, hábitos, conductas que la reafirmen.

Ø Ábrete a nuevas situaciones y experiencias: Cuando salimos de nuestra zona de confort y nos abrimos a los cambios atraemos hacia nosotros nuevas creencias.

Ø Aléjate de las causas que originaron tus creencias. Aquellas situaciones que te limitaron generaron unas creencias en ti.

Ø Apuesta por ti. Empieza a creer en ti, en tus habilidades y fortalezas.

MIS CREENCIAS NO SON LA VERDAD SOBRE MI, NI YO SOY MIS CREENCIAS

La mayoría de las creencias que he tenido en mi vida han tenido raíces profundas y fuertes sustentadas en los primeros años de mi vida.

Cambiar una creencia es de las cosas más difíciles que me he encontrado para hacer a lo largo de mi vida pero no por ello imposible. He tenido que tener mucha determinación, entrenamiento y disciplina para poder hacerlo. Me doy cuenta de que aunque haya algunas que ya he cambiado hay otras que por no ser conscientes requieren de todo mi interés. El primero de todos es querer hacerlo. Para ello he necesitado indagar y hacerme consciente de aquellas partes de mí que no quería ver. Sin duda ha merecido la pena.

                                                                                                                  Mirian Alonso

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Me gustaría saber qué creencias piensas que están limitando tu

 vida y la forma en la que crees que se pueden cambiar. Me encantará que me cuentes esto o cualquier cosa que te surja en el apartado de comentarios aquí abajo.

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